Ibagué

En Ibagué, cada encuentro presencial se transforma en una fiesta de alegría y unión familiar. Nos reunimos en parques y zonas recreativas donde los niños corren, juegan y se conocen cara a cara con aquellos compañeros que ven todos los días en clase virtual. Hemos realizado actividades como competencias de relevos, partidos de microfútbol y juegos tradicionales como el escondite y la cuerda, donde las risas y la camaradería llenan el ambiente.
Uno de los momentos más especiales fue nuestra visita al Parque Centenario, donde además de disfrutar de sus senderos, organizamos un picnic colectivo. Las familias llevaron sus comidas típicas, y entre todos compartimos historias, anécdotas y sueños para el futuro de nuestros hijos. Este tipo de espacios permite que los padres también se conozcan y se apoyen mutuamente, fortaleciendo así la red de acompañamiento que es tan valiosa en la educación de los niños.
Estos encuentros en Ibagué demuestran que la socialización no depende de un aula física, sino de la calidad y calidez de las experiencias compartidas. Cuando un estudiante juega, aprende y ríe junto a sus compañeros, está desarrollando habilidades que lo acompañarán toda la vida. Aquí, cada actividad es una oportunidad para crecer en comunidad y para que las familias se sientan respaldadas y motivadas a seguir confiando en nuestro modelo educativo.